Mi madre siempre me decía, hijo ama lo que haces,
has las cosas como si fueran para Dios, eso me daría
a entender que las cosas había que
hacerlas bien, con excelencia.
..."Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el señor servís"... (Col 3:26-24)
Aunque no siempre nos gusta lo que hacemos, y menos trabajar con gente que no nos agrada, cualquier cosa que hagas, cualquier cosa, sea trabajo o estudio, recuerda que siempre tendrás días malos y días buenos, pero nuestra actitud determinara nuestro estado de ánimo pues nuestra actitud esta directamente proporcional a como esta nuestra relación con Dios, lo mas prudente seria adoptar una nueva forma de pensar, hacer bien las cosas "TRABAJA PARA DIOS" y las cosas que hagas te serán más fáciles y placenteras.
Sabes algo, trabajas más y con mayor efectividad cuando te sientes discípulo. Hoy en día la mayoría de las personas trabajan en busca de una posición, poder y respeto, debemos trabajar con dedicación y respeto para con los que tienen mayor jerarquía sobre nosotros.
Cuando adoptamos una actitud afianzada en los Preceptos divinos de Dios, los cielos se colocaran a nuestro favor …"Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales”... (Col 3:22)
La obediencia trae bendiciones y no nos da cifras de rendimiento, sino que te dará una gran satisfacción al realizar cualquier trabajo. Nosotros, los hijos de Dios, debemos ser testigos de su gracia sobre todo en el trabajo, ya que es allí en donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo, es por eso que debemos aplicar los principios bíblicos de la obediencia y del sacrificio, porque cualquiera que sea nuestro jefe, nuestra autoridad es, Dios es la máxima autoridad y mira nuestras actitudes.
El desea vernos honrar su Gloria.
Hno. Douglas Guanipa
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